17 de març de 2018 00:00 h
L relidd veces imit l ficción. Y est l super, por supuesto. Aunque se difícil de entender esto ocurre más menudo de lo que creemos con cierts persons. Es el cso de l ventriloqui en l polític. El que mueve l boc no se treve decir lo que su insolente muñeco si hce. ¿Se cuerdn de Rockefeller? Pues sí, quí, hberlos hylos, como dicen en Glici con su rcísmo brujero. L ventriloqui (plbr derivd de ventrílocuo, que su vez proviene del ltín ventrilocuus, "el que hbl con el vientre") es el rte de modificr l voz pr imitr otrs voces u otros sonidos.
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